Me deja deseando más...

Siempre, siempre es así. Parece que es una regla o algo por el estilo, y nunca falla.

El mes previo a fin de cursos es un CAOS TOTAL! Los maestros se vuelven locos encargando tareas y proyectos largos y empiezan a presionar con la calificación final. Se siente el estrés en el ambiente combinado con la flojera de estar a un paso de alejarnos de la escuela por dos largos meses.

Las frases más escuchadas en este tiempo son "Pásame el trabajo de..." "¿Estudiaste? Me pasas el examen eeh!" y obvio "Ya quiero que sean vacaciones"

Las pláticas son quejas sobre los maestros y por supuesto, planes para el verano. Y la eterna promesa de mantener el contacto...promesa que en mi caso nunca se cumple =/

El mes pasa fugazmente y nos encontramos una semana antes de probar la libertad. Es cuando me pongo a considerar qué tan grande es la tortura de levantarme temprano en las mañanas para ir al instituto.

Los trabajos fueron entregados, los exámenes calificados, la paz interior de saber que no iremos a recursamiento y solo asistimos para arreglar pequeños detalles si es necesario. Los maestros se vuelven "buena onda", otros ni siquiera se presentan y podemos hacer lo que nos plazca con nuestros amigos. Y en esta semana sobra qué hacer y a donde ir. Ver una película en casa de alguien...irse a dar la vuelta o a comer a algún lado. Las frases más escuchadas cambian: "Que divertidos han sido estos días!!" "Que rápido pasó el semestre" y después "No quiero que sean vacaciones". Irónico.

Llegan los pensamientos de que soy un año más grande y falta un año menos para graduarme!!! Las conversaciones empiezan a ser sobre eso...aunque preferimos evitar el tema. Nos damos cuenta lo que no vamos a hacer en los dos meses de vacaciones. Se acaba la excusa de "voy a hacer un trabajo a casa de..." y hasta se extrañan los puestos de gorditas de por ahí.

La última semana, la de despedida, la que me deja deseando más...más días como esos, que por algún extraño motivo solo pasan los días previos a vacaciones.

Siempre, siempre es así. Parece que es una regla o algo por el estilo, y nunca falla.

¿Te pasa igual que a mí?