LA CUEVA DEL OBISPO ZUBIRÍA

Hoy les traigo la versión super-super-resumida de la leyenda de la Cueva del obispo Zubiría (que fue mi pariente).

La original está escrita en el libro "Crónicas y Leyendas Regionales de Canatlán, Dgo." Escrito por Luisito Carbajal (en paz descanse) y por el profe Ricardo Carrera. El libro se vende en la Farmacia Nueva eeeh xD

La original estaba muy larga y la mitad era historia, así que aquí está mi versión:

En las Villas de Durango y San Juan Del Río, se encontraba la Hacienda de Cacaria, que era muy rica y productiva. Contaba con todos los adelantos y comodidades del siglo XVII.

Como toda hacienda, estaba formada por una parroquia dedicada a Nuestra Señora de los Dolores, mejor conocida por los habitantes como Virgen de Cacaria; tenía la Casa Grande y la Tienda de Raya.

Cuando fue construida se creó un túnel con 3 salidas. Una daba hacia la parroquia, otra hacia el cuarto de los amos, en la Casa Grande. Y la última llevaba hacia un lugar poco concurrido del Valle de Cacaria.

Estos túneles fueron utilizados para esconderse!! Primero, de los indios que habitaban la región, más tarde para protegerse de los Insurgentes en la Guerra de Independencia, y por último, fue utilizado en épocas de la Revolución Mexicana.

Para ese entonces, estaba la Guerra de los Cristeros, y por todo el país estaban siendo perseguidos sacerdotes, obispos, etc. Y aquí, en Durando, se perseguía con más fervor al Obispo Monseñor Don José Antonio Laureano López de Zubiría y Escalante, en los años de 1833.

El Obispo efectuó una visita pastoral por su Diócesis que llegaba hasta Nuevo México en EUA. Este viaje fue muy largo y agotador, debido a los medios de transporte de la época.

A su regreso, el Obispo tomó todo su dinero y se fue a Durango. Esto hizo que sus enemigos se molestaran y le pidieran un préstamo forzado por $36'355.00 que fue pagado por la cooperación de distinguidos de Durango. Pero esto no fue suficiente, y después pidieron otros 2 préstamos. Creyeron que los pagarían con la misma facilidad que el primero, pero no fue así. El Obispo salió secretamente de Durango hacia Nieves Zacatecas, pero no encontró la seguridad que buscaba. Así que en el año de 1860, volvió a la Hacienda de Cacaria para que sus sobrinos lo ayudaran a esconderse. Ahí vivió oculto en el túnel que se encontraba en la Casa Grande, pero cuando las persecuciones arreciaban se escondía en una cueva de la Sierra Madre Occidental, que se encuentra actualmente en la Hacienda de San Rafael.

Así vivió dos años, entre la cueva y el túnel. Hasta que murió en 1863, cuando creía que había encontrado la tranquilidad, pues el Imperio de Maximiliano le había prometido seguridad y bienes eclesiásticos.

Fue sepultado en la iglesia de la Virgen de Cacaria. Un año después su cuerpo fue exhumado para trasladarlo a la Catedral de la ciudad de Durango, y según los registros que se tienen, no mostraba señal alguna de descomposición (°j°), característica solo atribuyente a los Santos.

Su dinero por el que tanto fue perseguido, se dice que fue oculto en el túnel con la ayuda de sus sobrinos, pero una vez muerto el Obispo, éstos tomaron solo lo "necesario" y emigraron a Europa, para jamás regresar. Años después vendieron la hacienda, a otras personas.

Actualmente la cueva donde se ocultaba es llamada La Cueva del Obispo. Es visitada por muchas personas y algunas van a pedir milagros. Tiene un altar y una placa de cantera, donde se cuenta la historia. Y un domingo de octubre, después del 24, día de San Rafael, se hace una gran fiesta, en nombre del Obispo Zubiría. Se dice que en la cueva, aun se siente la presencia del Obispo Perseguido.

En cuanto a la Hacienda de Cacaria, se encuentra totalmente abandonada, solo existen huellas de sus cimientos y una que otra deteriorada pared apunto de caerse.

El codiciado subterráneo, donde se dice se encuentra aún la fortuna del Obispo, nunca ha sido localizado ni por los vecinos del pueblo que es Nicolás Bravo, ni por buscadores de tesoros, o personas que inútilmente lo han buscado.

Quien visite el lugar, encontrará excavaciones por todas partes (jajaja). Se dice que el tesoro será encontrado por algún afortunado, si siquiera buscarlo. O bien, que el día que varias personas con un fin noble y desinteresado lo busquen, ahí sin más, lo encontrarán.

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Espero ser esa persona afortunada jajaja xD Aunque nunca he ido.

En fin, MAÑANA LA SEGUNDA PARTE DE LA HISTORIA!!!

La prueba de que el Obispo Zubiría hace milagros. Es una historia corta, pero vale la pena leerla.

COMENTEN!!